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Peñarol arrancó la temporada 13/14 en crisis quedó fuera de la Copa Sudamericana, perdiendo feo con Cobreloa, un equipo regular de Chile, y un arranque con muy mal pie frente a River Plate. En cuanto a lo deportivo, siempre se puede mejorar, pero existe un problema a nivel institucional, que desde hace años afecta al club carbonero, donde se generan problemas que a veces pasan inadvertidos por los hinchas cuando un resultado tapa carencias a nivel dirigencial.

Desde 1987 que existe la hegemonía Damiáni, Peñarol consiguió un título internacional, Copa Libertadores de ese mismo año, nueve títulos a nivel local, incluido el quinquenio del 93 al 97, pasaron 33 técnicos, de los cuales se repiten nombres como el de Gregorio Pérez, Julio Ribas, Fernando Morena, Diego Aguirre, entre otros. También cabe destacar que durante los años 91 y 92, estuvo al frente de la Presidencia aurinegra Washington Cataldi.

 

Durante el mandato de los Damiani, el Club Atlético Peñarol, tuvo su peor cosecha a nivel de clubes en el año 2006, estuvo siete años sin participar de torneos internacionales, y siete años sin conseguir títulos a nivel doméstico. Muchos atribuían este fenómeno, a la disputa generada de los dirigentes aurinegros con el empresario del futbol Francisco "Paco" Casal, al que se le acusa de manejar el fútbol uruguayo, teniendo de rehén a la AUF con los derechos televisivos. Durante la etapa de la pelea con "Paco" 2004-2009, el contratista no cedió jugadores al club mirasol, con la excusa de que Peñarol había declarado en rebeldía a jugadores de la institución como Cristián Rodríguez, Carlos Bueno y Joe Bizera, al no dejar que los jugadores sean transferidos a distintos clubes europeos, jugadores que tenían como representante al grupo Casal, y que seguramente el club había vendido parte de los derechos económicos al empresario. Si bien la actitud de los representantes hacia con los clubes uruguayos es parasitaria y negativa, los clubes aceptan las condiciones de susodichos personajes, a cambio de beneficios económicos, pero esto es algo que se estudiará en otro informe. En 2009 Casal y Peñarol solucionaron sus problemas, en una charla que se produjo en la oficina de Juan Pedro Damiani, subsanando diferencias y resolviendo temas temas del pasado. En este año el Grupo Casal, aporto jugadores al club, y Peñarol volvió a ser el líder del fútbol uruguayo obteniendo el título.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Luego de esto, sucedieron grandes cambios a nivel institucional, Damiani pudo subsidiar el déficit que el club mantenía, y se ideó un proyecto de tener un Estadio propio. Pese a las grandes aptitudes de Damiani hijo, a nivel económico, ya que su profesión es de contador y de gran forma administró un club con serios problemas económicos, problemas que surgieron durante la etapa de Damiani padre, vale resaltar. El club no ha conseguido empezar con las obras edilicias del Estadio propio, y aunque se hizo la presentación de la maqueta del edificio, se hizo una demostración  a la altura de la obra, y se vendieron los palcos, nunca se iniciaron las obras.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 Las excusas aparecen de todas partes, ya sea por inhabilitaciones de la Intendencia, ya que en primera etapa, se pretendía construir en las inmediaciones del Parque Roosevelt, pero los habitantes del lugar estaban en desacuerdo con la obra, alegando que dicho edificio destruiría los recursos naturales de la zona, y serian más propensos a la inseguridad, debido a que la turba carbonera, es acusada de revoltosa, aclarando que son unos pocos los revoltosos, y los hay en todos los ámbitos sociales y en cualquier hinchada. El Club Peñarol, por fin pudo conseguir una habilitación y comprar un predio en la Ruta 102, en las inmediaciones de Colonia Nicolich, lugar que pertenece a la zona de Canelones, y está claramente alejado de la zona céntrica de nuestra capital, es decir los hinchas dispuestos a ver a su equipo en su estadio deberían de trasladarse aproximadamente 40 minutos en bus, y 20 si viajaran en auto, según desde que punto de Montevideo o zonas cercanas viajen, y el tráfico que exista en ese momento.

El Club Atlético Peñarol o la empresa creada por el club Sociedad Anónima Deportiva (SAD), pagó 610 mil dólares por  el predio, y se acusó a Damiani de amiguismo a la hora de elegir la compra, acusación que fue desmentida por los dirigentes, alegando que el propietario del terreno vivía en Australia y el hermano del mismo estuvo a cargo de las negociaciones con el club. "El club vendió muy bien los palcos, pero no tan bien las butacas", esta son frases que promueven los dirigentes a la hora de justificar por qué no se ha podido construir el estadio. También se dice que a la hora de comprar el predio, Peñarol tenía un déficit de 13 millones de dólares, y más de 500 acreedores, y por ello hasta que el club no subsane sus deudas, no podrá construirlo, y recién en 15 o 20 años el club será dueño del mismo. La obra tiene un costo aproximado de 40 millones de dólares, que las empresas a cargo del proyecto pretenden cobrar al contado, esto tiene un tinte sospechoso, ya que las empresas que se encargan de  construcciones edilicias, por lo general firman contratos donde una parte se le paga al iniciar la misma, otra en mitad del proyecto, y se le liquida al concluir la misma, con la finalidad de que no existan haberes impagos por parte del cliente, y que la empresa cumpla en tiempo y forma la obra.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 Peñarol en el año 2011 recaudo en la venta de palcos, según fuentes oficiales, cerca de 10 millones de dólares, en el remate que se llevó a cabo en el Palacio Peñarol, además consiguió grupos inversores para iniciar el proyecto, y tuvo una gran campaña en la Copa Libertadores 2011, campaña que le dejo al club unos 4 millones de dólares en premios, y un promedio de 1 millón de dólares por partido, es decir 7 millones de dólares, ya que la gente en condición de local acompaño de gran forma al equipo, esto da un total de aproximadamente 11 millones de dólares para el club, sumados a la venta de palcos y butacas, da un total de 21 millones de dólares, simplemente aportado por lo deportivo y sus hinchas.

También cabe destacar que el club debe derivar parte de este dinero a empleados y mantenimiento, pero esto debe mantenerse aunque el club no participe de dichos eventos. En 2011 el club alcanzo un total de 50 mil socios activos, (es decir que pagan su cuota), a promedio de 140 pesos por mes, (es el mínimo imponible que pagan los socios, de allí todos los valores son superiores), el club percibe 7 millones de pesos mensuales, solo por conceptos de socios, a esto hay que agregarle la publicidad y sponsors que maneja el club, derechos televisivos a nivel local, y dinero que la AUF brinda a los clubes uruguayos en forma de subsidio, sin mencionar lo que el club pueda recaudar en concepto de transferencias teniendo en cuenta de que si vende también debe incorporar.

Además Peñarol solicito al BROU, un préstamo con la finalidad de iniciar las obras de 25 millones de dólares, préstamo que se estudia y muy probablemente será otorgado al club, ya que las acciones están bien encaminadas. Sumando todos los ingresos, Peñarol cubre ampliamente los 40 millones de dólares que costaría la obra iniciada por esta dirigencia.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

No solo el problema de Peñarol esta en lo económico, sino también en lo sanitario, es que en los últimos meses, se dio a conocer que los médicos de Peñarol, no llevan registros médicos de los diferentes futbolistas de la institución. Esta denuncia sale a la luz, a causa del dopping positivo del referente Darío Rodríguez, al cual se le encontró una droga que si bien, está permitida porque es de uso medicinal, los médicos de Peñarol deberían haber declarado la sustancia, en el parte de la AUF. Existe un conflicto entre los médicos de la institución, y en las horas pasadas ambos hicieron las respectivas declaraciones ante las autoridades correspondientes, ya que lo encargados de notificar la sustancia que apareció en los análisis de Darío, eran los doctores Rienzi, Pagano, y el kinesiólogo Germinal López, que ya cuenta con una suspensión preventiva.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Rienzi no se responsabiliza del hecho y en declaraciones hechas a la prensa, culpó directamente al ex-técnico de Peñarol Jorge Da Silva, aclarando que Darío Rodríguez no podía ni siquiera integrar el banco de suplentes, y que "El Polilla", fue el responsable de la decisión. Los abogados de los médicos son Amadeo Ottati, y el delegado de Peñarol en la AUF, el doctor Jorge Barrera.

Rienzi y Pagano, no hacen fichas médicas en el club, y esto sorprendió y despertó sospechas en dirigentes e hinchas, ya que lo que se estila en cualquier club del mundo, es tener registros médicos completos y personalizados de cada jugador, desde divisiones inferiores hasta las estrellas de primera. Es complejo el trato entre ambos médicos, ya que desde que Pagano llego en 2011, no establece comunicación con Rienzi, y peor aún, ninguno de los dos lleva registros médicos de los jugadores. Esta información despertó sospechas entre los dirigentes, que iniciaron una investigación interna en el club, ya que debido al alto grado de responsabilidad que tienen los médicos dentro del club, ya sea en casos como el de Darío, como cuando el club realiza la compra de algún jugador, los encargados de dar el visto bueno en cuanto a lo sanitario del futbolista, son los médicos y si ellos dan el visto bueno, la transferencia de dicho jugador esta prácticamente realizada. En 2012 el plantel de Peñarol estuvo minado de lesiones musculares, y esta responsabilidad además de corresponder al Preparador físico del entrenador de turno, también está involucrada con la sanidad del club, que debería revisar minuciosamente los estados de salud de los futbolistas.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

El mandato de los Damiani ha logrado grandes avances en lo deportivo, y en el hecho de profesionalizar el club, pero también ha sufrido grandes golpes institucionales, dejando un humo negro, en el cual hay dudas respecto a la administración. Algunas de las preguntas que se me ocurren en estas dudas: ¿Dónde se encuentra el dinero generado en 2011?, ya que la directiva aclaró que esos montos estaban destinados al Estadio. ¿Porque los médicos no perciben registros médicos? ¿Tienen intenciones económicas personales detrás de esto? ¿Cómo se administra el dinero que ingresa mensualmente por parte de hinchas, socios, derechos televisivos, etc.?

Por el bien de una institución gigante a nivel mundial, los invito a reflexionar y preguntarse hacia dónde va encaminado Peñarol y el futbol grande de este país, más allá de lo deportivo, porque muchas veces se utiliza lo deportivo para llegar al corazón del hincha común, pero la capacidad de administración de un club, es lo que marca precedente antes del resultado deportivo, es decir, si las cúpulas del club funcionan correctamente, de allí para abajo todo funcionará mejor, o por lo menos existen mayores garantías de éxito en el club.

Peñarol y los Damiani

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